En FixData hemos visto cómo, en los últimos años, los ataques de ransomware han evolucionado y se han centrado cada vez más en sistemas de almacenamiento en red (NAS). Para pequeñas y medianas empresas, un NAS no es solo un repositorio de archivos; es el corazón de sus operaciones, donde residen proyectos, bases de datos y respaldos críticos. Cuando un ransomware logra cifrar o corromper esos volúmenes compartidos, el impacto es inmediato: paralización de la actividad, riesgo de fuga de información y presión para pagar rescates que pueden superar el costo de recuperación.

A continuación desglosamos cómo opera el ransomware en NAS, cuáles son las muestras más comunes en 2025, qué consecuencias trae para tu negocio y, sobre todo, cómo puedes recuperarte: desde protocolos internos y software especializado hasta la opción de nuestros servicios Express y Fix Plus para asistencia técnica profesional. 

¿Cómo ataca el ransomware a un NAS?

Un ataque de ransomware dirigido a un NAS suele combinar varios vectores:

  1. Compromiso inicial de credenciales
    Mediante phishing, fuerza bruta o vulnerabilidades de firmware, el atacante obtiene credenciales de administrador o de un usuario con permisos de escritura.
  2. Propagación lateral y escalada
    Una vez dentro de la red, el malware explora carpetas compartidas en el NAS, aprovecha protocolos inseguros (SMBv1, FTP sin cifrar) o utiliza herramientas como Mimikatz para robar tokens de acceso y elevar privilegios.
  3. Cifrado masivo de archivos
    Con permisos de escritura, el ransomware encripta archivos en series de carpetas preestablecidas, renombrando extensiones y dejando instrucciones de rescate (README_ENCRYPTED.txt) en cada directorio.
  4. Eliminación o cifrado de instantáneas (snapshots)
    Muchos NAS modernos permiten crear snapshots automáticos; el malware anula o borra estos respaldos internos para impedir restauraciones sencillas.
  5. Exfiltración de datos (doble extorsión)
    Antes o después de cifrar, algunas variantes ex filtran datos sensibles a servidores externos, amenazando con publicarlos si no se paga el rescate.

El resultado es una situación de crisis en la que los archivos están inaccesibles y las copias automáticas pueden haber sido desactivadas o eliminadas. Además, al ser un NAS un dispositivo siempre encendido y constantemente accesible, el ransomware puede ejecutar acciones de cifrado de forma silenciosa y progresiva, dificultando una detección temprana.

Consecuencias ejecutivas y financieras

Cuando tu NAS queda comprometido por ransomware, el impacto se extiende a varios frentes:

  • Interrupción de servicios
    Al no poder acceder a bases de datos, archivos de colaboración o respaldos, las operaciones diarias se detienen, generando cuellos de botella y retrasos.
  • Pérdida de confianza
    Clientes y proveedores ven comprometida la imagen de tu empresa si se demora en restaurar servicios o, peor aún, si los datos personales se filtran.
  • Pago de rescates
    Aunque no existe garantía de recuperar todos los archivos tras el pago, muchas empresas deciden ceder ante la presión. Un rescate puede oscilar entre unos miles hasta cientos de miles de dólares, dependiendo del tamaño de la red y las capacidades del atacante.
  • Costos de recuperación y auditoría
    Incluso si decides no pagar, la recuperación técnica —análisis forense, restauración desde respaldos fríos, limpieza de malware— implica horas de consultoría, licencias de software y posibles reemplazos de hardware.
  • Cumplimiento regulatorio y sanciones
    En sectores regulados (salud, finanzas), la pérdida o exposición de datos sensibles conlleva obligaciones legales y multas por incumplimiento de normativas como GDPR o LFPDPPP.

Por ello, ante un ataque de estas características, no basta con apagar el NAS y volver a encenderlo: se requiere una respuesta estructurada que combine la restauración técnica con medidas de contención y comunicación.

Estrategias de prevención y mitigación

Antes de llegar al extremo de un ataque exitoso, puedes adoptar varias buenas prácticas para reducir la superficie de exposición de tu NAS:

  • Segmentación de red y VLAN
    Aísla tus dispositivos de almacenamiento de la red general, limitando los protocolos disponibles solo a equipos autorizados.
  • Actualizaciones constantes
    Aplica parches de firmware y actualizaciones de seguridad tan pronto como estén disponibles. Muchos ataques explotan vulnerabilidades conocidas sin parchear.
  • Autenticación multifactor (MFA)
    Habilita MFA en el panel de administración del NAS y en cuentas de usuario con permisos elevados.
  • Cifrado de extremo a extremo y snapshots protegidos
    Complementa el cifrado en reposo del NAS con snapshots de solo lectura o versiones inmutables (WORM), de modo que el ransomware no pueda borrarlos.
  • Copias de seguridad offline y en la nube
    Mantén respaldos regulares fuera de línea (discos externos desconectados) y en servicios de nube confiables para evitar la doble extorsión.
  • Monitoreo y detección de anomalías
    Implementa sistemas de alertas basados en cambios de archivos masivos o picos inusuales de CPU/IO en el NAS.

Estas estrategias, si bien no garantizan un 100 % de inmunidad, reducen drásticamente las probabilidades de que el malware cifre o elimine tu información sin previo aviso.

Pasos para recuperarte tras un ataque

Si a pesar de las medidas previas tu NAS sucumbe al ransomware, es momento de actuar rápido y con método:

  1. Aislar el dispositivo
    Desconecta físicamente el NAS de la red para evitar la propagación a otros equipos y la exfiltración seguida de datos.
  2. Evaluar instantáneas y respaldos
    Revisa si existen snapshots intactos o respaldos offline disponibles. Si los snapshots están protegidos o fueron creados en otro soporte, restaurar desde allí suele ser la vía más veloz y limpia.
  3. Identificar la cepa de ransomware
    Con herramientas como ID Ransomware, determina qué variante te afectó. En algunos casos, existen decryptors gratuitos publicados por la comunidad de seguridad.
  4. Intento de desencriptación
    Si ya dispones del código o hay un decryptor público, aplica el proceso en una copia idéntica del volumen. No trabajes sobre el original para evitar daños colaterales.
  5. Limpieza forense
    Realiza un análisis de integridad de archivos y detecta posibles backdoors o scripts residuales. Un reinicio sin una limpieza adecuada puede reactivar el ransomware.
  6. Reparación de volúmenes y permisos
    Tras desencriptar o restaurar, verifica la coherencia de permisos de acceso y ajusta cuotas para evitar episodios similares.
  7. Actualización y hardening
    Una vez recuperado el acceso, aplica todas las mejoras de seguridad y cambia las credenciales comprometidas.
  8. Comunicación y reporte
    Notifica a clientes, proveedores y autoridades (de ser necesario), y documenta cada fase de la recuperación: qué respaldos se usaron, qué herramientas, tiempos y responsables.

El rol de FixData y nuestros servicios

En FixData, con más de 24 años de experiencia y un laboratorio equipado con cuarto limpio, entendemos la urgencia que supone un ataque de ransomware en tu NAS. Por eso ofrecemos dos servicios fundamentales que pueden marcar la diferencia:

  • Servicio Express: atención prioritaria 24/7, diagnóstico inmediato de tu NAS y volúmenes, limpieza forense del malware y entrega de la información recuperada en el menor tiempo posible. Este servicio es esencial cuando cada hora de inactividad representa pérdidas millonarias o riesgo reputacional.
  • Servicio Fix Plus: si tu NAS está en otra ciudad o país, te enviamos una guía detallada de envío para que prepares el dispositivo sin riesgos. Así nos aseguramos que los discos y componentes lleguen en perfecto estado, y podemos comenzar el diagnóstico en laboratorio tan pronto los recibamos.

Ambos servicios contemplan garantías de confidencialidad, respaldo de tu información por 15 días y atención personalizada vía WhatsApp, email y teléfono. Además, contamos con diversas formas de pago para ajustarnos a tu presupuesto y urgencia.

Lecciones y recomendaciones finales

El ransomware en NAS no es un problema exclusivo de grandes corporaciones. Cualquier SMB que centraliza datos en un dispositivo de red es vulnerable si no aplica buenas prácticas de seguridad. Para evitar que una intrusión se convierta en una pesadilla, recuerda:

  • Mantén respaldos offline y protegidos contra escritura del NAS.
  • Segmenta tu red y utiliza MFA para acceder al servidor.
  • Supervisa snapshots y habilita versiones inmutables.
  • Ten un plan de respuesta definido: roles, respaldos, comunicaciones.
  • Si ocurre lo peor, cuenta con un aliado como FixData para una recuperación rápida y profesional.


En un marco donde el ransomware evoluciona cada día, tu NAS puede ser tanto una solución de productividad como un riesgo si no se protege adecuadamente. En FixData estamos listos para acompañarte en cada paso: desde la auditoría preventiva hasta la recuperación express de datos cifrados. ¡Contáctanos y asegura la continuidad de tu negocio!